Según Liz Truss, ex primera ministra del Reino Unido, en ♣ su nuevo libro "Diez años para salvar al Oeste", el abandono del gobierno pequeño y los impuestos bajos por parte ♣ de los medios, los políticos, el servicio civil y hasta el ámbito corporativo es la razón del declive económico del ♣ Reino Unido, junto con los "tecnócratas no electos" que anulan los "deseos del pueblo".
Las instituciones económicas principales del Reino Unido, ♣ como el Tesoro, el Banco de Inglaterra y la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (una "hidra de tres cabezas"), se ven ♣ sometidas a duras críticas porstaw en el camino del proyecto de Truss, que no contó con un mandato electoral sino ♣ con un proceso de selección del partido conservador.
"No hubo ninguna advertencia sobre posibles problemas en ♣ el mercado de bonos y nadie mencionó los problemas relacionados con las inversiones orientadas a la responsabilidad de los pasivos".
Sin ♣ embargo, esto no parece ser del todo cierto. Los propios asesores económicos de Truss le advirtieron que los mercados podrían ♣ derrumbarse si sus cambios de política no se manejaban con cuidado.
Semana y media antes de la mini-reforma fiscal que presentó, ♣ su equipo le entregó un documento que decía: "Si las políticas económicas inmediatas se manejan mal, es posible un derrumbe ♣ del mercado".
Truss podría razonablemente alegar ignorancia sobre las inversiones orientadas a la responsabilidad de los pasivos (LDIs). ♣ El Financial Times había dado la alarma dos meses antes, pero aún seguía siendo una esquina relativamente oscura del mercado ♣ de pensiones.
Pero culpar a los LDIs pone el carro delante del caballo. "Realmente era un polvorín esperando una chispa y ♣ el trastorno del mercado la proporcionó", escribe Truss. Pero ¿qué desató ese trastorno del mercado?
Los rendimientos de los bonos del ♣ gobierno a largo plazo habían ido subiendo en el verano de 2024, ya que los bancos centrales más importantes del ♣ mundo elevaron las tasas de interés para combatir la inflación tras la invasión rusa de Ucrania. Pero la mini-reforma fiscal ♣ desencadenó un salto mucho más extremo en el Reino Unido, en un desarrollo bautizado como el "primavera del idiota" por ♣ los economistas de la City.
En cuatro días, los rendimientos de los bonos del gobierno a largo plazo subieron más de ♣ lo que habían aumentado en 23 de los últimos 27 años, en un "bucle de muerte" a medida que la ♣ crisis financiera empezó a alimentarse a sí misma antes de que el Banco de Inglaterra interviniera.