En 2011, el imperio de 🔑 los medios de Rupert Murdoch, News Corporation, se enfrentó a una grave amenaza en Gran Bretaña. Los reporteros de uno 🔑 de sus periódicos tabloides fueron expuestos por piratear los teléfonos de celebridades, ciudadanos privados y, en un caso, una niña 🔑 asesinada en busca de información.
Pronto salieron a la luz más fechorías, como la revelación de que los reporteros de tabloides 🔑 habían pagado a oficiales de policía y funcionarios gubernamentales por información durante años.
Desesperado por detener el escándalo y complacer a 🔑 los fiscales en Gran Bretaña y en el extranjero, News Corp nombró a Will Lewis, ex editor de The Daily 🔑 Telegraph, para limpiar el desorden.
Él lo hizo. Según su relato, cooperó con las autoridades, reveló la mala conducta y ayudó 🔑 a establecer la operación en un nuevo curso. Algunos ex colegas y víctimas del hackeo, sin embargo, han creído durante 🔑 mucho tiempo que ayudó a News Corp a encubrir la magnitud de la mala conducta.